La sexualidad y la maternidad

Cuando nos unimos a una persona comienza un juego de hormonas, involucramos sentimientos y llegan a ser tan fuertes que decidimos pasar al siguiente nivel. Algo donde los cuerpos se unan y más allá del contacto físico sea una compenetración físico-emocional, es en ese punto donde entra en juego la sexualidad, existen algunas culturas o religiones donde la sexualidad aún tiene muchas restricciones moralistas, es como si dijéramos que solo podemos tener sexo para procrear.

La sexualidad en la pareja es algo tan sano, tan fundamental; que los une y no debe ser tratado con miedos, pena y mucho menos falta de comunicación, la comunicación es fundamental en la vida de pareja. Bien sabemos que Ser padres es el mayor proyecto de nuestras vidas

Puedes estar unido por pacto, matrimonio, noviazgo; pero que le pasa a tu relación de pareja y a esa compenetración sexual cuando llega la maternidad?

Muchos hombres o mujeres al llegar a este punto donde se enteran que van a ser padres ven esa unión sexual como un monstruo que va a dañar el bebé, algunos hombres piensan que a la pareja le duele todo y no quieren tocarlas; pues en el embrazo el deseo sexual de la mujer aumenta esas mismas hormonas locas que los unen ahora son la mejor amiga de la futura madre por 9 meses lo cual la hará llorar, gritar, tener mucho deseo sexual, el cual bajo ningún motivo es dañino salvo que el ginecólogo considere que debe ser paralizado por laguna condición médica.

Futuro papá no vas a dañar a tu hijo si estas con tu mujer !!!

Diversos estudios demuestran que dos tercios de los padres “nuevos” o los que son primerizos reportan un declive en sus matrimonios durante el primer año de la vida del bebé. Las razones pueden ser muy variadas y diferentes en cada caso.

“el hecho de tener un bebé puede llegar a tensionar hasta las relaciones más sólidas”.

Como madres llegamos a desarrollar ciertos comportamientos peculiares que hacen que los padres se sientan algo celosos con la llegada del bebé “Lo que deseamos y necesitamos de nuestros esposos podría cambiar cuando hay alguien en nuestras vidas que también necesita de nuestro tiempo y de nuestros cuidados” este comportamiento según estudios solo se da en la mujer y responde a estímulos cerebrales que tratan de reforzar el vincula madre e hijo; por otro lado los padres sienten que han sido degradados al “sector más bajo del Tótem familiar”.

Luego de la llegada del bebé Todo empieza a volverse un poco más negro cuando empezamos a acumular cansancio y sueño. Además, nuestra vida sexual no vuelve tan rápido, se empeñaba en seguir de vacaciones que puedo hacer? Esta interrogante es muy familiar y conocida por los padres. Situaciones como que el padre duerma un poco más que la madre puede ser detonante de guerra. Por algo dicen que el primer año de la maternidad es el más duro.

Es por ello que deben evolucionar y desarrollar nuevas actividades

·        Planifiquen un “fin de semana de entretenimiento”. Una vez que se sientan confortables como padres de dejar solo al o la bebé por las noches.

·        No exigir en exceso. Muchas mamás primerizas o que son nuevamente mamás, fijan a sus parejas estándares muy altos a sus esposos. Por lo que ellos, en la misma situación como padres, se quejan porque sin importar qué hacen para ayudar con los niños o el hogar, parece jamás ser suficiente.

·        Evita el Coitus era del hielo, así me gusta decirle, aunque es posible que las cosas se hayan enfriado en el dormitorio matrimonial después de haberse convertido en padres, esa práctica debe retomarse lo más pronto posible. “El sexo es uno de los factores que mantiene unido al matrimonio, y sin él, su relación podría reducirse a una simple sociedad doméstica sin sentimientos ni pasión”

La maternidad afecta la relación con la pareja en la medida que ambos lo permitan, lo ideal es que platiquen de los temas que los incomodan y trabajen en ellos para resolverlos lo más inmediato posible. Y tú, ¿qué harías para resolverlo?